Por fin llegó el esperado viernes, 18 de marzo de 2016 en
el que iba a tocar la archifamosa banda de Mago de Oz, que tras proclamar su
“sold out”. Éste se reflejaba en la larga cola que había fuera de la sala y
dentro, donde me cogí un privilegiado sitio en tercera fila para poder ver el
show y disparar buenas fotos.
A las 22.15, con 45 minutos de retraso y sin teloneros,
salían Mago de Oz uno a uno cada componente con una ovación, mientras sonaba la
intro “Prólogo” del disco nuevo re-editado de Finisterra Opera Rock.
Comenzaron con “Satania” que fue un acierto elegir esta
canción, ya que los fans la cantaban en alto y saltaban al son de la música.
Uno a uno cada tema de Finisterra iban sonando, como la
coreara y solicitada por el público que da nombre al álbum “Finisterra”, fue
presentada por el vocalista “Zeta” y dijo que iban a tocar todas las canciones
de dicho álbum.
Los músicos de Mago iban enlazando canciones de este
antiguo álbum como ”El que quiera entender que entienda”, en la que el teclista Javi Díez comenzaba a tocar el piano o “La cruz de Santiago”, donde los guitarrista
hacían unos solos descomunales con headbanging sincronizados en los rifts de
guitarras y en la que el guitarrista Carlitos se acercaba al auditorio para tirarles
una púa.
Con “Duerme” cantada íntegramente por la corista de Mago
Patricia Tapia, tomó un lado romántico el concierto.
El cantante Zeta dijo que se iban a tomar un descanso de
5 minutos y volverían, pero dejaron sonar del mismo equipo de música “Conxuro”
para amenizar la pequeña espera.
Regresaban con ganas, pero esta vez sólo el violinista y
el flautista para tocar la intro de “Fiesta Pagana”, en la que con tan sólo
tocar una nota los fans ya sabían que iban ser esta famosa canción que les
catapultó a la fama.
Tras terminar “Astaroth” el propio Zeta presentó al nuevo
Flautista que se llamaba Diego (como yo) e introdujo al resto de integrantes:
el violinista Mohamed, el bajista Fernando Mainer, el teclista Javi Díez, el guitarrista Carlitos, el guitarrista Frank, la corista y segunda cantante Patricia Tapia y el batera Txus de Fellatio.
Se fueron, aunque esta vez dijeron que no volverían, pero
sí lo hicieron, pues ya era tiempo de los bises con la rescatada ”Molinos de
viento” del disco la Leyenda de la Mancha para que el público enloqueciera
saltando y cantándola a pleno pulmón casi por encima del mismísimo Zeta.
Sin duda, un show muy ameno, a pesar de tocar todas las
canciones de Finisterra. Se hizo corto la hora y media de concierto, y a los
fans les hubiera gustado que tocaran más himnos de Mago Oz tanto de lo antiguo
como de lo nuevo. Pero, la banda se despidió sin más, tirando toallas,
baquetas, púas y botellitas de agua para los sedientos.