En la noche del Sábado 16 de Noviembre de 2019 los
incondicionales del metal teníamos en la sala Even de la capital hispalense una
cita obligada con dos bandas de estilos distintos que se han dado cita en esta
velada: los incombustibles Mauser y
los variopintos Crazy Zombie.
Debido a problemas técnicos de la batería hubo un retraso de
más de una hora. Ya por fin a las 22:45 se subió al escenario Edu Powerage para
presentar a Mauser. A continuación
sonó la intro del último plástico de los mismos titulado “Colgar al ladrón”, comenzando
acto seguido con la trallera “No aguanto más”, con la que notamos la buena
pegada de Leo - el nuevo batería – con el acompañamiento de unas guitarras
endiabladas. Después disfrutamos de la clásica “La locura”, con la que el público
se vino arriba con vítores y con una grandiosa ovación final. Luego llegó el
turno de “Fe ciega”, tras la que el frontman Ernesto alentó encarecidamente a
la gente a comprar su nuevo disco, y de “Colgar al ladrón” del que hay un
flamante videoclip en YouTube.
Seguimos con más caña con la reivindicativa “Dinero por
sangre”, tras la que el cantante presentó a Leo, el jovencísimo nuevo batería,
que con tan solo 14 años es un monstruo
a las baquetas. Pero no solo iban a tocar temas propios sino que también
caería algún cover como el de los míticos Iron Maiden, concretamente “Be Quick
or Be Dead”, que llevaron a su terreno de modo magistral, que es el Thrash
Metal (¡exacto! ese es su estilo).
De nuevo vuelta a la brutalidad con la bestial “Éxodos”.
Anecdóticamente, durante esta canción un fan perdió su gorro y Ernesto tuvo que
anunciarlo el cantante después hasta que por fin lo recuperó. Y entramos en la
recta final con la veloz “Velocidad matar odio” y la apabullante “La vieja
negra”, en la que los guitarristas intercambiaron unos magníficos solos de
guitarra.
A continuación sonaría otro cover, esta vez de Pantera y
aquí el voceras bromeó diciendo que iban a tocar una balada. Después ejecutaron
“Despojo” con la que los asistentes hicieron pogos.
Y para los nostálgicos del Trash escogieron del set list la
archifamosa canción de Slayer “Raining Blood”, de la que tocaron una versión de
menor duración.
Para los bises elegirían la larguita “Todos a la calle”,
tras la que hicieron un breve descanso antes de la última, “Pan y Circo”, que
dejó al público bien calentito para el siguiente grupo.
Crazy Zombie venían presentando su nuevo álbum “Rebirth”y no
es precisamente la típica banda.
Ellos cuidan su puesta en escena al milímetro con unas máscaras geniales a lo Slipknot desde los primeros temas “7
Sins”, “Forevermore” y “I’ll Protect the Flame”. Para cantarlos se subió una
bella ángel negro con cuernos que, para mi sorpresa, era Vicky de Wild Chain - la nueva cantante - que
junto a Roche el nuevo vocalista de la formación hicieron las delicias del
respetable.
A continuación sonaron “An Endless Groove”, “Room Full of
Mirrors” y “Family Resamblance”, con las que notamos su estilo Nu Metal con
arreglos electrónicos. Después llegó el turno de “To Live in Peace” y “The
Harvest”, con las que se metieron al público en el bolsillo. Aquí Roche
aprovechó para auto promocionarse diciendo que había merchandising de Crazy Zombie en la sala. Y no podía
faltar “Under the Sun”, incluida en el disco “Damned Birth” y en el que ha
colaborado Andreas Lutz de O’Funquillo.
Puesto que esta no pudo asistir al evento, la vocalista Vicki se encargó de sus
partes vocales.
Y para la última tanda de canciones escogieron la bonita
“Levitation” con la que Vicki se marcó unos sexys bailes orientales, la
brillante “Something Human” y la aclamada “Crazy Zombie”, que tiene unos rifts
de guitarras muy pegadizos y con la que los allí presentes - yo incluido - participamos
en los coros.
En resumen, los conciertos de Mauser y Crazy Zombie
han sido espectaculares. Con respecto a los primeros, destacaría la fuerza del
jovencísimo batería y el sonido demoniaco de las guitarras. Y en cuanto a Crazy Zombies, diría que sus máscaras
serían mucho más realistas si llevaran los ojos maquillados. Aparte de que quitando que el teclado en
algunas canciones no se escuchaba bien, esas fueron mis únicas pegas. Por lo
demás, ¡chapó! me quito el sombrero.
Mi más sincero agradecimiento a Carlos Castellanos por la
corrección de este texto y a la banda Mauser por haberme concedido el pase de
prensa.