La tarde del viernes 12 de mayo de 2017 se presentaba con
cielos parcialmente nubosos y breves lloviznas, pero eso no iba impedir que
fanáticos del metal se reunieran afuera
de las puertas de la sala X de Sevilla para asistir a la primera edición
Inferno Sur Festival. Este evento estaba organizado por Producciones Speakon
trayendo a seis bandas españolas: Nuclear
Antichrist, Dugo, Physix, Onomasy, Ebola D. P. y Brothers Till We Die.
Como seguían el orden mencionado, los sevillanos Nuclear Antichrist eran los encargados
de abrir la noche. Esta banda hace Death Metal mezclado con Thrash Metal,
venían presentando temas propios como “Nuclear Legions”, pero también tocaron
covers: la famosa cover de Venom “Black Metal” y cerrando con la archiconocida
canción de los trashers Slayer “Raining Blood”. Aquí pude vislumbrar una banda
muy joven (apenas llevan un año de existencia) con ganas de comerse al
escenario que animaba a que el público hiciera pogos, alzaran sus cuernos y hasta hacer un Wall of
Death, buen entremés para abrir boca de lo que se nos avecinaba.
Los próximos en tocar eran Physis, grupo de Metalcore sevillano. Esta banda está formada por
cuatro miembros: Sam como vocalista, Jaime a la guitarra (que ya lo conocía de
sus anteriores grupos en Dark Puppets y My Mom Dances Mosh), Jesús al bajo y
Rafa a la batería. Estos iban acometer temas de su próximo álbum en proceso de
mezcla “Squared Sequence”. Un ejemplo de los singles que tocaron fue “"Uncontrolled
Plague". Finalmente cerraron con el tema que da nombre al álbum. Tuvieron
poco tiempo para presentar algunos temas, ya que iban justo de tiempo con el
tema de los horarios.
Los siguientes en tocar tras el cambio de instrumentos era Dugo, que proceden de Dos Hermanas
(Sevilla), bajaban la intensidad, pero no la calidad, ya que estos hacían
Rock/Metal alternativo con voces limpias y rapeadas, Nano Domínguez y Salva
Scorval eran los encargados de las mismas. Estaban presentados temas de su
primer trabajo “Gotas de Brea”, por lo que temas como “Sin Aire” y “Tiras a
Matar” cayeron entre otros. Aunque esta vez el público esta va más “paraete”,
la cosa se animó en alguna que otra canción con pogos, pero esta música no
animaba a hacer pogos, aun así el público lo hicieron, porque se estaba
caldeando el ambiente.
Lo de Onomasy es
indescriptible, tanta brutalidad desde el primer momento de saltar al
escenario, demostrando así lo que hacen en el mismo: Technical Death Metal.
Abrieron con “The Maze of Unhapiness”, “I am” y “Digging up The Moon” del
álbum que estaban presentando esa noche “Ashes and Dust”, que recién
sacaron este mismo mes; aquí los pogos rulaban por el público. Esta banda
demostró gran puesta en escena y furiosos guturales de la mano de su vocalista.
Continuaron con este nuevo
plástico con “Advantage of the Disadvantage“
y “Descending to The Other Side”.
Mencionar que este grupo lo forman: Armando a la guitarra, Alvaro como
vocalist, Mario al bajo y Samuel a la bacteria y Pablo como segundo guitarra.
“Ashes and Dust” y
“The Heritage of The Loyal” fueron los temas elegidos para cerrar este
concierto, también pertenecientes a este disco. Pude vislumbrar una banda con
un show enérgico, toda una apisonadora arrasando en el escenario; se nota que sean merecedoras
de haber llegado a la final del Resurrection Fest.
Cambio de tercio, esta vez era turno para Ebola D. P. que aparecía el escenario
tapados por un telón blanco mientras tocaban “Virus” correspondiente al disco
“Khrom”. Tras finalizar la canción, bajaron el telón para continuar su show con
“Tu Camino”, “Trece” y “Falsa Necesidad” de este mismo plástico ya mencionado,
en la que la dicha canción última cantaban el público los coros “¡¡¡uooooo!!!” .
Esta banda hace un Death Metal, autodefiniéndose que tienen estilo propio como
“Khromcore”.
Pero, no sólo iban tocar temas de este álbum, también iban a
rescatar temas como “Rencor” de su antiguo EP “Nuevas tribus”. Y regresábamos
de nuevo al álbum en cuestión que estaban presentando, por lo que se sucedían
temas como “Es Ocasión” y “Póstrate” con un vocalista que subía y bajaba a un
cajón elevador que la misma banda había traído, que ya de por sí era alto el
frontman, los que estábamos en primera fila teníamos que elevar la cabeza al
máximo para verle.
Un detalle fue que el cantante Ruso creó un Wall of Death en
la canción “último Round”.
Se despidieron con su ya clásico “Machete” del que tienen un
videoclip en la que gente del público se subió a cantar, dejando el listón muy
alto para los cabezas de cartel.
Cerrando la noche se disponían a salir a escena unos
madrileños Brothers Till We Die, que
tras sonar la Intro se disponía a salir uno a uno los miembros de BTWD: El
vocalista Felipe Alemán, el guitarrista Mario Vian, el bajista Carlos Guty, el
guitarrista Edu barber, el baterista Pablo Martín. Como estaban presentando su
nuevo álbum “The Thin Line Between Death and Immortality”, tenían que abrir con
la canción que tiene el mismo nombre que el disco, en la que los dos
guitarristas Edu y Mario se encargaban de los coros de esta canción (y las del
resto del concierto). Seguían tocando el álbum en cuestión con “Hand to Hand” y
“Facta Non Verba”.
Inciso: Este grupo relativamente joven (de cuatro años de
trayectoria) hacen Hardcore Metal.
Después de esto, seguíamos escuchando temas como “Batsu” de
su disco “Blood.Death.Suffering.Pain” y “Back in the Game” con su Intro electrónica,
tema perteneciente a su último disco ya mencionado.
Y el show proseguía con con
“Cain y Abel”, del que rodaron un videoclip en directo en el Resurection
Festival en 2015.
Volvíamos con su “The Thin Line Between Death and
Immortality” con “Delusional Parasitosis”, “Body.Mind.Soul”, “[Bushidō]”, “Deconstruction” y “Agony Loves Me”, en el
que el vocalista, bajista y guitarristas intercambiaban posiciones
continuamente para animar a un público super entregado.
Y para poner broche final terminaron con “Real Eyes Realize
Real Lies” de “We Will Never Grow Up”. Así se fueron abandonando el escenario,
pero como el público pedía más tocaron un bis llamado “Anaconda”, cover de Nicky
Minaj, y que trabajito me costó tomar buenas fotos con esos saltos que pegaba el cantante desde su cajón, mientras los demás instrumentistas agitaban sus cabezas fuertemente.
En conclusión, buen show en general por parte de todas las
bandas participantes, sin grandes problemas de sonido, todo marchó a pedir de
boca, esperemos que con la segunda edición del Inferno Sur traigan más bandas,
que aunque sean emergentes son buenas porque la escena metalera está muy viva
en el Sur.
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